Desde
1973 se han descubierto una serie de tablillas de madera en donde los romanos
de la época escribieron una serie de textos de su vida cotidiana utilizando
tinta de carbón.
Los
escritos nos da una idea del estilo de vida de la época. Uno de estas tablillas
ha tomado importancia en las últimas semanas, es un texto que mandó a escribir la
mujer del comandante del castrum para invitar a su hermana a una fiesta de
cumpleaños.
El
texto dice así:
De Claudia Severa a Lepidina,
Saludos hermana.
Para el día de la
celebración de mi cumpleaños, el 11 de septiembre, te doy una cordial
invitación para vengas. Si tu estás presente esa fecha será más agradable para
mí.
Dale mis saldos a
Cerealis. Aelius y mi pequeño hijo también le envían saludos.
Voy a esperarte
hermana.
Adiós hermana, mi
querida alma con esperanza de prosperar.
Para Sulpicia Lepidina,
esposa de Cerealis, de parte de Severa.
El análisis caligráfico demuestran que todas las tablillas eran escritas por una
sola persona, esto porque los castrum tenían escribanos que se dedicaban a elaborar
reportes, notas y cartas, pues la mayoría de personas en la antigüedad europea
eran analfabetas.
Sin
embargo esta tablilla tiene una característica especial, la despedida de la
carta (Adiós hermana, mi querida alma, con esperanza de prosperidad) aparentemente
fue escrito por la mano de Severa; la mujer que mandó a escribir la invitación, este es el primer texto conocido que ha sido escrito en latín por la mano de una mujer.
Aquí la imagen de la tablilla.
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