He visto Apocalypto casi en su estreno, tuve la oportunidad de verla en Los Angeles, California, unos pocos días antes de la navidad del año 2006, en un cine que no me acuerdo y que ni se donde queda, me llevaron dos buenos amigos que aun viven en los Angeles y trabajan en TACA en el aeropuerto internacional de Los Angeles LAX.Me he vuelto a encontrar con la película cuando trataba de conseguir el documental de National Geographic llamado "The Dawn of Mayas" el cual ha sido grabado casi todo en Guatemala y trata sobre los últimos descubrimientos arqueológicos de los mayas del preclásico. Ahi en la página de amazon aparecía brillando -y en oferta- Apocalypto de Mel Gibson.
No pude dejar de mencionar entre dientes la palabra "mierda" cuando la vi en oferta, y es que este film de Gibson si pudo insultarme hasta la última fibra.
Fundamentalmente por dos cosas, la primera por sus garrafales errores etnoarqueológicos y la segunda por su mensaje oculto.
Vamos por partes:
Evidentemente la película es una creación artística, no un documental, lo que le da licencia a su creador para hacer casi cualquier cosa, o presentar cualquier tonteria, de hecho esa fue una de las excusas que presentó Mel Gibson ante el reclamo de la comunidad académica que tildaban a Apocalypto como una gran burrada. Compro la excusa de que no es un documental, y que no hay ni por cerca que tomarlo en serio... el problema es que este tipo de narrativas de veras construyen formas de ser, de ver y de imaginarse el pasado. Y cuando ese pasado que nos imaginamos está completamente fuera de foco, terminamos por disneylandisar nuestra propia historia y de imaginarnos a los mayas de Gibson viviendo en Palenque, Copán o Kaminaljuyú.
Ahora siendo detallistas la película tiene varios problemas, uno de ellos es que los mayas que presentan parecen caricaturas del Clásico Mesoamericano, o sea, gente que vivió entre el 200 d. C. al 900 d.C., pero luego nos damos cuenta -cuando llegan los españoles- que estabamos en el postclásico terminal, completamente fuera de tiempo!.
No pude dejar de mencionar entre dientes la palabra "mierda" cuando la vi en oferta, y es que este film de Gibson si pudo insultarme hasta la última fibra.
Fundamentalmente por dos cosas, la primera por sus garrafales errores etnoarqueológicos y la segunda por su mensaje oculto.
Vamos por partes:
Evidentemente la película es una creación artística, no un documental, lo que le da licencia a su creador para hacer casi cualquier cosa, o presentar cualquier tonteria, de hecho esa fue una de las excusas que presentó Mel Gibson ante el reclamo de la comunidad académica que tildaban a Apocalypto como una gran burrada. Compro la excusa de que no es un documental, y que no hay ni por cerca que tomarlo en serio... el problema es que este tipo de narrativas de veras construyen formas de ser, de ver y de imaginarse el pasado. Y cuando ese pasado que nos imaginamos está completamente fuera de foco, terminamos por disneylandisar nuestra propia historia y de imaginarnos a los mayas de Gibson viviendo en Palenque, Copán o Kaminaljuyú.
Ahora siendo detallistas la película tiene varios problemas, uno de ellos es que los mayas que presentan parecen caricaturas del Clásico Mesoamericano, o sea, gente que vivió entre el 200 d. C. al 900 d.C., pero luego nos damos cuenta -cuando llegan los españoles- que estabamos en el postclásico terminal, completamente fuera de tiempo!.
Luego el eclipse solar fue un insulto, el heroe se salva de la muerte al filo de obsidiana por un eclipse solar, luego logra escapar de los que lo tienen capturado y al llegar la noche, vemos una hermosa luna llena. Como pudo la luna en tan pocas horas cambiar de luna nueva a cuarto creciente y luego a llena?!!
En su momento muchos reclamaron que la imagen de los indigenas estaba afectada, los mayas de Gibson eran demasiado violentos, en realidad lo que vemos aqui es el eterno binomio gringo, de los chicos buenos y los chicos malos, y los chicos malos -los mayas de la ciudad- son altamente violentos sin una razón de peso, son violentos solo por que son malos, punto. De ahi la película se transforma de una abortiva pelicula sobre los mayas a una especie de Rambo mesoamericano que defiende su familia, su gente y su selva, matando uno a uno a los chicos malos, hasta que al final, sin escape en una playa, se encuentra con unos españoles que se bajan de unas naos, con su cruz cristiana. El mensaje es claro, ahi llegan los cristianos (la caballería) y se salva el tipo, Gracias a Dios! -o sea, al Dios cristiano no a Quetzalcoat-.
La pelicula es una basura, tiene terribles errores arqueológicos, etnográficos, de espacio y de tiempo. Calificar con un viejo salvajismo anaftalinado a una civilización tan desarrollada y exquisita es injusta, incalifiable y absurda. El sacrificio y la muerte, ejes fundamentales de la cosmogonia antigua, es vapuleado y es presentado a traves de la clásica moral cristiana postmoderna. Por ahi leí que "Querer conocer a los mayas a través de Apocalypto es como desear comprender a los dinosaurios viendo Godzilla", no puedo estar más de acuerdo.
Gracias a Gibson veo que el espíritu europeo destructor de etnias y civilizaciones esta aun presente. Esta gente ya no mandan sus cruzadas, sus barcos y sus espadas para someternos y destruirnos, ahora buscan la Mass Media para llevar a nuestras incautas identidades a sus extraños y oscuros derroteros.
Y construyen su Dinseylandia sobre Copan.
En su momento muchos reclamaron que la imagen de los indigenas estaba afectada, los mayas de Gibson eran demasiado violentos, en realidad lo que vemos aqui es el eterno binomio gringo, de los chicos buenos y los chicos malos, y los chicos malos -los mayas de la ciudad- son altamente violentos sin una razón de peso, son violentos solo por que son malos, punto. De ahi la película se transforma de una abortiva pelicula sobre los mayas a una especie de Rambo mesoamericano que defiende su familia, su gente y su selva, matando uno a uno a los chicos malos, hasta que al final, sin escape en una playa, se encuentra con unos españoles que se bajan de unas naos, con su cruz cristiana. El mensaje es claro, ahi llegan los cristianos (la caballería) y se salva el tipo, Gracias a Dios! -o sea, al Dios cristiano no a Quetzalcoat-.
La pelicula es una basura, tiene terribles errores arqueológicos, etnográficos, de espacio y de tiempo. Calificar con un viejo salvajismo anaftalinado a una civilización tan desarrollada y exquisita es injusta, incalifiable y absurda. El sacrificio y la muerte, ejes fundamentales de la cosmogonia antigua, es vapuleado y es presentado a traves de la clásica moral cristiana postmoderna. Por ahi leí que "Querer conocer a los mayas a través de Apocalypto es como desear comprender a los dinosaurios viendo Godzilla", no puedo estar más de acuerdo.
Gracias a Gibson veo que el espíritu europeo destructor de etnias y civilizaciones esta aun presente. Esta gente ya no mandan sus cruzadas, sus barcos y sus espadas para someternos y destruirnos, ahora buscan la Mass Media para llevar a nuestras incautas identidades a sus extraños y oscuros derroteros.
Y construyen su Dinseylandia sobre Copan.
3 comments:
Yo nunca vi Apocalypto. No sé si verla.
Por cierto, le puse a su mamá un mensaje en el blog y de paso me lo balconeé, jiji.
Nos vemos.
Bajo el titulo Apocalypto deberia decir: "Based on the Game for Commodore 64: Azteca Challenge".
Una pena, toda la gente en Europa que ha visto esa pelicula ahora cree que esa es la verdad sobre las civilizaciones que habían en América... bueno, no toda, el Español promedio, sin mucho interés por abrir un libro y estudiar en serio, de los que creen que si sale en TV o en el Cine esa es la verdad, creen que Apocalypto es un documental mas que una pelicula.
Una pena... y no me extiendo porque me pueden llegar a quitar la residencia.
Hasta luego Lucas...
Me encanta este post!
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